La moda sostenible, o sustainable fashion en inglés, es una verdadera tendencia en el mundo de la moda. Implica una actitud respetuosa no sólo con la naturaleza, sino también con las personas, lo que significa unas condiciones laborales seguras y éticas para los trabajadores, un consumo responsable de los recursos y su uso a largo plazo, la adhesión al principio de «cero residuos», el apoyo a las economías locales y mucho más.

En general, este concepto se considera una especie de ideología a la que se adhieren con vehemencia todos los activistas ecológicos y las personas que no son indiferentes a la preservación del medio ambiente. Existe incluso todo un concepto de ESG, que implica hacer negocios según los principios de responsabilidad medioambiental, social y corporativa.

Los principios de la moda sostenible
¿Sabía que la industria de la moda está considerada como una de las más «perjudiciales» para el medio ambiente? En 2014 se produjeron 311 millones de toneladas de plástico. Y si la capacidad de producción no se reduce, la cantidad de plástico podría cuadruplicarse en los próximos 30 años. Teniendo en cuenta que alrededor del 5% del plástico se recicla efectivamente, mientras que la mayor parte acaba en los vertederos o se incinera, merece la pena reflexionar sobre las consecuencias de esta sobreproducción.

Es a través del uso de materiales sintéticos, la sobreproducción constante, etc., que se produce la mayor contaminación ambiental

Por ello, el principal objetivo de la moda sostenible es reducir el impacto negativo sobre la naturaleza y mantener su condición favorable.

Los principios básicos de la moda sostenible son

El respeto por el medio ambiente, es decir, el uso de tejidos orgánicos, ecológicos o reciclados, y de accesorios y embalajes adecuados y respetuosos con el medio ambiente.
La ética, es decir, el pago puntual de salarios justos a los trabajadores, la no utilización de materiales de origen animal obtenidos de forma ética, etc.
Cero residuos, que puede incluir el uso de un solo material en la composición, la recogida selectiva de residuos en la producción, la personalización, la posibilidad de personalizar el producto y mucho más.
Transparencia, evidenciada por una sección en el sitio web de la marca ecológica sobre el medio ambiente, una sección separada en los medios sociales de la marca sobre su ética y sostenibilidad.
Economía, expresada en el apoyo a las poblaciones marginadas y vulnerables, el apoyo a la economía local, la artesanía popular, etc.

Y las prácticas individuales de la «moda sostenible» incluyen:

Consumo responsable y responsabilidad social con las personas que participan directamente en la producción de la ropa;
Reutilización de cosas;
Reciclar cosas;
Reparar las cosas en lugar de comprar nuevas alternativas.

En la realidad actual, encontrar una marca realmente digna que se relacione con el concepto de «moda sostenible» es cada vez más difícil. Pero si se observa la adherencia de una marca a los principios señalados anteriormente, se puede determinar fácilmente si es o no lo suficientemente sostenible.

El precio de la moda sostenible
La mayoría de los compradores de ropa están convencidos de que la «moda sostenible» es la alternativa más cara a la «moda rápida». Los tejidos naturales y sostenibles suelen ser al menos una vez y media más caros que sus homólogos artificiales (sintéticos). Por ello, los productos fabricados con materiales naturales suelen pertenecer a un segmento de precios más elevado. Pero es importante entender que los productos de moda sostenible no sólo son respetuosos con el medio ambiente, sino también duraderos. Por lo tanto, estos artículos pueden considerarse una buena inversión.